Bahía, el otro carnaval

Por Francisco Rabini

Hoy comienza lo que el libro Guiness certificó como la fiesta más grande del planeta. Y este año Salvador festeja los 60 años de la invención del "trío eléctrico", megaescenarios móviles donde tocan las bandas mientras desfilan por los barrios de la ciudad.

El de Río de Janeiro puede ser el carnaval más famoso del mundo. Pero no es todo lo que Brasil aporta en la materia. En Salvador de Bahía existe otro carnaval, menos espectacular según algunos, más auténtico según otros.

Las diferencias? En Salvador no hay sambódromo, ni comparsas, ni vallas que separen a la gente de las carrozas: acá no se viene a ver un carnaval, se viene a participar en él. Con más de dos millones de personas danzando por la ciudad, el de Bahía es considerado el carnaval más grande y fue certificado por el libro Guiness como la mayor fiesta popular del planeta.

Desde hoy y hasta el 16 de febrero esta ciudad respira música y baile. Este año habrá festejos especiales, porque se cumplen 60 años de la invención de los tríos eléctricos, el símbolo distintivo del carnaval bahiano.

La historia dice que en 1950, Adolfo Antonio Nascimento (Dodó) y su amigo Osmar Alvares de Macedo se presentaron a los desfiles sobre un antiguo Ford T que habían transformado en un palco móvil. Dodó, que era técnico eléctrico, conectó los instrumentos a la batería del auto para magnificar su sonido. Al año siguiente repitieron la actuación, pero invitaron a otro amigo a tocar con ellos. Así, el nombre del grupo, Trío Eléctrico, terminó bautizando la invención. Ahora los tríos eléctricos se diseñan y fabrican especialmente y cuentan con grandes escenarios y sofísticados sistemas de sonido y luces.

Los tríos recorren la ciudad por tres circuitos: Pelourinho, Barra-Ondina y Campo Grande, según los nombres geográficos. O Batatinha, Dodó y Osmar, como se conocen popularmente. Atrás de ellos, miles de personas danzan por calles y avenidas. Osmar es el circuito más antiguo y por él desfilan los blocos (corsos) más tradicionales. El recorrido dura alrededor de 6 horas y el desfile comienza al mediodía. El Dodó es el más turístico, por los paisajes que permite observar en su camino, y en él se ubican los palcos de los artistas famosos. La fiesta empieza a animarse al caer la tarde y se prolonga por la noche hasta la madrugada. El de Batatinha no tiene trios eléctricos, solamente bandas musicales recorriendo el antiguo barrio de Pelourinho.

Los blocos están abiertos al público y para formar parte de uno sólo hay que pagar la admisión. Uno recibe una remera –llamada abadá-, que lo distingue y le permite seguir el show desde un lugar cercano al trio, dentro de un cordón. Otra forma de disfrutar el carnaval es desde los camarotes, especie de tribunas que se encuentran a lo largo de la ruta que siguen los trios. Allí suelen ofrecer barra libre, comida y música de DJs para bailar. Pero los precios son muy altos.

Finalmente, si no se quiere pagar por ninguna de estas opciones, se puede hacer de 'pipoca' (pochoclo, por estar siempre saltando): la gente aquí no pertenece a un bloco, pero acompaña al trio eléctrico desde fuera del cordón. O estacionarse en alguna de las barracas (puestos de venta de bebidas) ubicadas a lo largo de los distintos circuitos del carnaval, donde se reúne la gente y organiza sus fiestas paralelas.

El ritmo musical que impera es el axé. Surgido en Bahía en la década de 1980, alcanzó la madurez en la década siguiente y se expandió por todo Brasil. La palabra Axé proviene del idioma yoruba y su significado es 'energía vital'. Mezcla ritmos como la samba, el frevo y el reggae. Y en sus coreografías incorpora aspectos de samba-reggae, afro, afoxé, hip-hop, danza contemporánea e incluso el aeróbic.

Los conjuntos musicales pueden salir con distintos blocos según el día, no son fijos. Es por eso que los precios para participar en uno dependen de quienes toquen ese día. Las dos principales atracciones son Chiclete com Banana e Ivete Sangalo, considerada la mayor cantante brasileña de la actualidad. Otras figuras importantes que participan del carnaval son Asa de Aguia, Daniela Mercury, Banda Eva, Timbalada, Olodum, Araketu, Gilberto Gil, Carlinhos Brown, etc.

En cuanto a la seguridad, Domingos Leonelli Neti, secretario de Turismo de Bahía, aseguró a Clarín.com que se invirtieron unos 40 millones de reales (casi 80 millones de pesos) para garantizar la tranquilidad de quienes lleguen a Salvador durante el carnaval. "El sistema de seguridad que montamos todos los años es tan exitoso que han venido de España, Francia y otros países a estudiarlo", aseguró. El funcionario admitió que "el resto del año, las medidas de seguridad bajan, pero de todos modos más del 90% de quienes vienen a Bahía sale feliz y sin ser molestado".

Salvador comienza los festejos de un nuevo carnaval y es siempre una buena excusa para conocer esta histórica ciudad. Y sino, el resto del año la situación tampoco varía demasiado: aquí se reconoce que el bahiano "si no está en una fiesta, está ensayando para una".

Fuente: Clarín.com

Los dejo con un video de 2005 considerado la mejor pauta publicitaria hecha hasta ahora por la secretaría de turismo del estado de Bahía. Ya sabrán por que... Luego uno del 2008 -2009

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